Semana del 6 al 10 de noviembre de 2023

 

Proponemos que, en algún momento de la semana, antes del comienzo de la oración de la mañana y con el objetivo de trabajar la interioridad, trabajemos con los alumnos algunas actividades pensadas para aprender técnicas de relajación o de toma de conciencia de su propio yo…

Esta semana proponemos tomar conciencia de nuestro propio cuerpo, en concreto de los hombros y el cuello. Mientras lo hacemos podemos poner música tranquila de fondo:


 

Nos sentamos buscando una postura cómoda… Cerramos los ojos y respiramos despacio, con calma…  Escuchamos tranquilos la música… Respiramos profundamente y muy despacio… Cogemos aire por la nariz… lo mantenemos un instante… lo soltamos lentamente por la boca.

Imagina que eres una tortuga. Estás sentada, sobre una roca, muy a gustito. Relajándote muy tranquila y muy feliz en un lugar fantástico. Hace sol y calor, hay un estanque muy cerca de ti. Te sientes muy cómoda y feliz…

De pronto… ¿qué pasa? No lo sabes bien, pero sientes que estás en peligro, sientes miedo. ¡Tienes que esconderte! ¡Mete tu cabeza en el caparazón! Lo haces llevando tus hombros hacia tus orejas, con la cabeza entre los hombros, así, bien escondida, muy protegida. Ya está… no hay peligro, sal de tu caparazón, no tienes nada que temer. Vuelve a relajarte tumbada al sol, siente sus rayos sobre tu cara. Vuelve a disfrutar plácidamente del paisaje… Siente tus hombros que ya no están tensos, tu cuello también relajado, estás muy cómoda… (El ejercicio se repite tres veces)

Escuchamos la música unos instantes más…

Lentamente abrimos los ojos y estiramos hacia adelante los brazos juntando las manos…

 

 


 

LECTURA: NO HACEN LO QUE DICEN – (cf. Mt 23, 1-12)


A Jesús le molestaba mucho la actitud de los jefes judíos. Por eso, un día, hablando a la gente, quiso enseñarles todo lo que esas autoridades hacían mal. Y les dijo:

“Mirad, los escribas y fariseos, que mandan en vosotros, no son buenos. Lo que dicen está bien, pero lo que hacen no. Vosotros escuchad sus palabras, que hablan de Dios y amor, y cumplidlas, pero no hagáis lo que ellos hacen. Porque hablan de Dios, pero son unos presumidos. Hablan de cumplir la ley y obligan a otros a cumplirla, pero ellos hacen lo que les da la gana. Presumen de humildad, pero están deseando que los aplaudan, que les hagan reverencias por la calle y los llamen maestros”.

La gente estaba sorprendida con las cosas que decía Jesús. Él siguió. “Mirad, vosotros no os dejéis llamar maestros, que solo Dios es vuestro Maestro; ni padres, que solo Dios es vuestro Padre. Vosotros sed humildes y estad dispuestos a servir a los demás. Y cuanto más poder tengáis, que sea más para servir a quienes de verdad lo necesitan”.



  

REFLEXIÓN

Conocemos lo que Jesús nos dice y podemos contárselo a los demás… Pero es mucho mejor que lo conozcan por cómo nos comportamos: que sepan que hay que amar porque ven que somos cariñosos con los demás y no les contestamos mal, que sepan que hay que compartir porque ven que repartimos lo que tenemos…

Pensamos unos momentos qué podemos hacer cada día para que, quiénes nos rodean, conozcan el mensaje de Jesús por nuestros actos.

 

 

 

CANCIÓN: JESÚS ESTÁS CONMIGO



ORACIÓN

Jesús

ayúdanos a quererte

con todo nuestro corazón

y a querer mucho a los demás

Ayúdanos a querer y a ayudar

a todos por igual.

 

  

CUENTO: EL ERIZO QUE NO SE QUERÍA PINCHAR



 

ORACIÓN

Jesús, tú quieres mucho

a los niños como yo.

Te hiciste amigo de los más pobres.

Yo quiero parecerme a ti,

compartiendo todos mis juguetes.

Te pido por todos los niños.

Ayúdales, Jesús.

Yo también te echaré una manita

para ayudar a los que pueda.