Semana del 16 al 20 de septiembre de 2024
¡Buenos días! Antes de comenzar la
oración de la mañana, es buen momento para situarse en el medidor emocional...
¿Cómo te sientes hoy?
NOTA PARA LOS PROFESORES QUE DIRIGEN LA ORACIÓN:
Estimado amigo:
Como sabes en junio del año 1824 el H. Gabriel deja Belleydoux, su pueblo natal, a la edad de 25 años para fundar la Congregación de los Hermanos de la Sagrada Familia. Con este motivo la oración de los terceros martes de cada mes tendrá un matiz vocacional y emplearemos momentos de esta etapa de la vida del H. Gabriel para animarla, sin olvidar la importancia que tuvo su infancia y los años vividos en Belleydoux para su vocación y misión. Es una etapa dura del Hermano Gabriel que le ayudó y afianzó en su vocación de religioso hermano.
Gracias a todos por ser miembros de esta gran familia Sa-fa.
1.“La historia de nuestro Fundador se identifica con la de nuestra congregación”
Una Familia cristiana.
En el colegio te hablamos del Hermano Gabriel, fundador de los Hermanos de la Sagrada Familia, para que aprendas a querer su vida, su familia y lo que hizo. Nació el 1799. En un pueblo de Francia llamado Belleydoux. ¿Dónde naciste tú? ¿Dónde nacieron tus padres? Habla a los compañeros de clase de tu familia…Habla de tu familia a tus compañeros y reza por ella
REZAMOS POR NUESTRA FAMILIA
Jesús, te pido hoy por toda mi familia.
Por mis padres para que tengan salud.
Por mis hermanos y por mí, para que nos queramos.
Los niños pueden seguir pidiendo por los miembros de su familia... Acabamos con el Padrenuestro
Proponemos que, en algún momento de la semana,
antes del comienzo de la oración de la mañana y con el objetivo de trabajar la
interioridad, trabajemos con los alumnos algunas actividades pensadas para
aprender técnicas de relajación o de toma de conciencia de su propio yo…
La
primera propuesta de esta semana nos ayudará a tomar conciencia de nuestro propio cuerpo, en concreto de
las partes de la cara (boca, ojos, orejas, barbilla, frente, mofletes y nariz).
Comenzamos creando un ambiente tranquilo. De pie,
pedimos que, cada uno, vaya señalando las partes del cuerpo de se vayan
nombrando: boca, ojos, nariz, orejas…
Cerramos los ojos y nos tumbamos en el suelo, boca
arriba, con las manos sobre la tripa. Respiramos hondo y comprobamos como entra
y sale el aire por la nariz y por la boca. Se les pide que respiren
profundamente, con los ojos cerrados… Una vez que se van relajando, les pedimos
que, sin señalar ni tocar, centren su atención en cada una de esas partes de la
cara…
Finalmente, se les preguntará cómo se han sentido.
Nuestra segunda propuesta es hacer una visualización llamada la TÉCNICA DE LA NUBE:
Pedimos a los niños que cierren sus ojos, inspiren
lenta y profundamente por la nariz… expiren lentamente por la boca… les
invitamos a que busquen una postura cómoda (sentados o tumbados) e imaginen
unas nubes grises en el cielo que, empujadas por el viento VAN Y VIENEN.
Mantenemos la respiración mientras observamos como las nubes se mueven. En un
momento dado, imaginamos como, una a una, esas nubes grises se van despidiendo.
Seguimos respirando mientras contemplamos el cielo sin nubes durante unos instantes…
LECTURA: ¿QUIÉN CREÉIS QUE SOY? (cf. Mc. 8, 27-35)
Entonces, Jesús, les preguntó a ellos: «Y vosotros, que me conocéis tan
bien, ¿quién creéis que soy?» Pedro ni lo dudó: «Tú eres el Mesías». El Mesías
era para los judíos el enviado de Dios para traerles la libertad. Pero los
judíos pensaban que iba a ser como un líder muy poderoso. Así que Jesús le
dijo: «Tienes razón, pero tenéis que saber que el Mesías no va a ser ni el más
rico, ni el más fuerte, ni el más violento. Al revés, tendrá que sufrir, hasta
morir y resucitar». Pedro, al oír eso, interrumpió: «Ni hablar, Jesús, no
dejaremos que mueras». Entonces Jesús le mandó callar: «No te enteras, Pedro.
Que Dios no quiere poder y fuerza, sino amor». Entonces siguió explicándoles, y
les decía: «El que quiera venir conmigo, que no sea un orgulloso ni un egoísta,
que acepte su cruz y me siga. Que la vida no es para guardarla en una caja
fuerte, sino para regalarla a los otros».
Jesús, tú quieres que todos los niños,
vivamos como amigos,
compartiendo lo que tenemos,
aunque seamos diferentes.
Ayúdanos a querer a todos.
CANCIÓN: LA SEÑAL DE LA CRUZ
Papá
Dios. Gracias.
Por
los amigos
que
juegan conmigo...
Y
me escuchan y me quieren...
Y
me echan de menos
cuando
falto a clase...
Y
me consuelan
cuando
estoy triste...