Semana del 16 al 20 de diciembre de 2024

 ¡Buenos días! Antes de comenzar la oración de la mañana, es buen momento para situarse en el medidor emocional... ¿Cómo te sientes hoy?

 

Proponemos que, en algún momento de la semana, antes del comienzo de la oración de la mañana y con el objetivo de trabajar la interioridad, trabajemos con los alumnos algunas actividades pensadas para aprender técnicas de relajación o de toma de conciencia de su propio yo… Proponemos dos actividades para dos momentos distintos a lo largo de la semana:

La primera propuesta contiene un momento de respiración y una visualización. Podemos poner música tranquila mientras llevamos a cabo esta relajación: 



Nos colocamos en una posición cómoda… con las manos sobre la tripa. Cerramos los ojos y respiramos profundamente… Sentimos cómo nuestra respiración se va haciendo cada vez más tranquila… Nos concentramos sólo en nuestra respiración… Inhala suavemente por la nariz, como si estuvieras oliendo una hermosa flor. Siente cómo el aire hace crecer tu tripa como un globo. Ahora exhala despacito por la boca, como si estuvieras soplando suavemente las velitas de un pastel. Sigamos respirando así, inhalando por la nariz y sintiendo cómo el aire llena tu tripa, y luego exhalando por la boca, soltando todo el aire.

Imagina que estás en un hermoso lugar, quizás en un campo lleno de flores de colores o en la orilla de un lago tranquilo. Puedes escuchar el suave murmullo del agua o el canto de los pajaritos. Siente cómo estás rodeado de amor y paz. Continuemos respirando así por unos momentos más, disfrutando de este lugar tranquilo y hermoso en tu mente. Sigo respirando profundamente mientras escucho la música… Poco a poco abro los ojos, me siento, estiro los brazos…



La segunda propuesta consiste en practicar la respiración abdominal. Para ello, pedimos que se sienten en una postura cómoda y que coloquen una mano en el abdomen (por encima del ombligo) y la otra en la parte superior del pecho.

Indicamos que respiren profundamente por la nariz. A medida que el abdomen se expande hacia arriba y hacia afuera, dígale que observe cómo sube la mano inferior. Después les pedimos que exhalen lentamente por la boca, sintiendo cómo baja la mano inferior.

Para estimular una exhalación lenta, les pedimos que finjan soplar una vela al exhalar. Repetimos haciendo varias respiraciones profundas.

 

 

 

LECTURA: QUÉ TENGO QUE HACER (cf. Lc. 3, 10-18)


¿Os acordáis de Juan, del que hablamos la semana pasada? Mucha gente iba a verlo y le preguntaban: "¿Qué tenemos que hacer?" Juan les decía: "Si tienes dos chaquetas, da una a alguien que no tiene. Si tienes dos bocadillos, comparte uno." A los que cobraban dinero les dijo: "No pidáis más de lo justo. " Y a los soldados: "No maltratéis a la gente." Todos estaban sorprendidos con lo que decía. Pensaban que tal vez Juan era el Salvador que estaban esperando. Pero Juan les dijo: "El Salvador aún no ha llegado. Él es mucho más grande que yo. Yo os bautizo con agua, pero él os bautizará con el Espíritu Santo." Y todos se emocionaron esperando la llegada del Salvador.

 

 

 CANCIÓN: ROCK DE LA ESTRELLA



LECTURA: EL NACIMIENTO DE JESÚS



 ORACIÓN: PREPARA EL CORAZÓN

¡Jesús va a llegar!

María se pondrá muy contenta.

La mula y el buey le darán calor,

los ángeles cantarán,

los pastores y los Reyes,

guiados por la estrella,

irán a adorarle.

Preparemos nuestro corazón

para que nazca en él.

 

 

CUENTO: EL DUENDE MÁGICO

 (pincha sobre el nombre para poder ver)


ORACIÓN

Jesús, estamos contentos

porque se acerca la fiesta de Navidad.

Será una fiesta muy bonita

y habrá muchas cosas que nos harán felices.

Jesús, enséñanos a compartir

con los que más lo necesitan.




Las terceras semanas de cada mes, durante este curso,
tenemos presente al VHG. Este curso celebramos el 200 aniversario de su salida de Belleydoux.
 

Hoy recordamos un momento muy especial de la vida del Hermano Gabriel. Cuando llegó a un pequeño pueblo llamado Jeurre, le pidieron que enseñara a los niños y les hablara de Dios. Pronto, todos en el pueblo decían: “¡Nos han enviado a un misionero!”.

El Hermano Gabriel quería ayudar más, así que juntó a algunos jóvenes para vivir juntos como una comunidad. Pero un día, la casa donde vivían se cayó, y tuvieron que marcharse. ¡Imagínate lo valiente que fue el Hermano Gabriel para empezar de nuevo!

(Se puede poner la canción de Valivan, La casita sobre la roca)



Todos juntos le decimos: ¡Gracias, Gabriel!

Acabamos con un Padre Nuestro... V.H.G. – Ruega por nosotros.